Documentos TV – Un pulso al fracaso (2010)
Funciones docentes de desarrollo intelectual afectivo psicomotriz, social y moral.
Desde la Fundación Tomillo, buscan ofrecer una atención más individualizada en este centro a chicos con dificultades por conflictividad o baja asistencia escolar (principalmente). Son alumnos que creen estar anclados en el fracaso escolar, normalmente por un bajo concepto de sí mismos, se sienten incapaces y encasillados por la sociedad como tal. Todo ello unido a situaciones personales como problemas familiares o escaso interés y motivación por obtener el graduado escolar consigue frenar su educación durante la etapa adolescente. Este centro busca orientar sus aptitudes hacia una actividad profesional como principal mecanismo de motivación para los chicos.
En el procedimiento de admisión, primero se les somete a una
entrevista inicial en la que se evalúan los problemas que han llevado a los
chicos al fracaso escolar. Aquí encontramos chicos que han suspendido la educación
secundaria, con problemas personales, de consumo, o incluso problemas con la
justicia. Llegan con muy malas experiencias escolares en la mochila. Pero
quieren demostrar que son capaces.
Desde la Fundación Tomillo, buscan aportar valor no sólo en conocimientos sino principalmente en crecimiento personal, autonomía, preocupación el mundo interior de los chicos y un buen desarrollo afectivo. Para ello son tratados por los docentes como una hoja en blanco, acercándose al alumnado y suponiendo buena actitud y buenas intenciones. Se trata de partir de la idea de que todos los alumnos tienen la intención de demostrar sus capacidades. Para ello, los docentes fomentan más actividades fuera del aula, actividades de compañerismo, sus intereses y sus sentimientos para una formación no tanto curricular, si no como personas. Otras actividades incluyen la participación de los alumnos en programas de ayuda a mayores (p. ej.: informática) para obtener una instantánea de ellos mismos siendo útiles, viéndose capaces de enseñar a los demás, lo que mejora su autoestima. Respecto a los castigos se busca que sean en la medida de lo posible productivos, como por ejemplo pintar la valla del colegio durante el recreo. Se facilita también constantemente la constatación de los logros individuales de los chicos. Entre ellos, la asistencia y la puntualidad es el primer logro.
Respecto al equipo de educadores, estos ponen en común sus
objetivos con los chicos, conformando un equipo cuya principal intención es
inspirar a los chicos y facilitar un trabajo conjunto con ellos. Su trabajo incluye
escuchar a los chicos y conseguir eliminar entre ellos la idea de asistir a
clase como una rutina tortuosa. En la expresión y la forma de tratar a los
alumnos se constata la importancia de los sentimientos de los chicos, a parte
de la educación formal, en competencias y contenidos. Escucharles, darles la
palabra, trabajar en los temas en los que ellos mismos no se encuentran a gusto
permiten recuperar su ilusión y el valor personal de cada uno.
Otro programa incluye a los chicos que no pueden ir a clase por
sentirse demasiado traumados con respecto a la escuela. Ayudan a esta labor los
trabajadores sociales, pidiendo incluso ayuda a sus amigos o familia y
fomentando el acompañarlos a actividades que quieran ellos, todo desde la
positividad e intentando contagiar su entusiasmo.
A todos los alumnos se les motiva con prácticas laborales al final del año, actividades orientadas a la formación en un oficio. Es un gran motivador para ellos ya que en primer lugar buscan introducirse al mundo laboral cuanto antes. Los educadores persiguen con este incentivo conseguir la motivación necesaria para seguir trabajando en ellos y conseguir hacerles salir del estado mental negativo y de fracaso en el que pueden estar anclados. Y es que los muchos comentarios negativos que han recibido a lo largo de su etapa de estudio, ha podido hacer mella en su visión de la enseñanza.
Me parece muy elogiable la labor que realiza la Fundación Tomillo que nos has presentado. Ofrecer oportunidades a aquellos descartados del sistema es necesario y enriquecedor.
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