Objetivos de la educación

En el Semestre Europeo, que es el ciclo anual de coordinación de las políticas europeas establecido por la Comisión Europea, se realiza una evaluación específica de cada Estado miembro, analizando su situación económica, sus agendas de reforma y se establecen recomendaciones específicas para cada país, según proceda. Estas proporcionan asesoramiento sobre políticas a medida para los Estados miembros en áreas consideradas como prioritarias. Los gobiernos de los países miembros a su vez deberán publicar informes explicativos de las medidas tomadas para alcanzar los objetivos nacionales. La verificación y supervisión de los progresos realizados en la consecución de los objetivos nacionales está centrada en garantizar un crecimiento inteligente, sostenible e integrador.

El Semestre de 2021 continúa el Pacto Verde Europeo y el concepto de sostenibilidad competitiva desarrollado durante 2020. Incluye programas nacionales de reforma, recuperación y resiliencia.

En los últimos informes destacaban entre otros, al respecto del Empleo en España, que una elevada tasa de abandono escolar prematuro dificultaba la integración de los jóvenes en el mercado de trabajo y en la sociedad en general.

Eso sí, recalcaban una alta participación en educación y cuidados de la primera infancia por encima de la media europea en primer y segundo ciclo.

Apreciaban también una mejora en términos globales sobre la educación y capacidades, pero empañada debido a los resultados de importantes indicadores ya sean la tasa de abandono prematuro y repetición de curso, una difícil transición al mundo laboral, que titulados superiores ocupen empleos que no requieren estudios superiores, una baja proporción especializada en carreras de ciencias/tecnologías/ingeniería/matemáticas, la baja matriculación en FP superior, una baja participación de poco cualificados en aprendizaje para adultos y un bajo nivel de capacidades digitales.

Sobre la Formación Profesional, tenemos una de las puntuaciones más bajas en índice de capacidades europeo, mala puntuación en puestos técnico nivel medio-alto, participación baja en FP medio y capacidades aún por adaptarse a la economía digital y al mantenimiento del medio ambiente. Ha habido también una mejora en la proporción de trabajadores y demandantes de empleo con bajo nivel académico, junto con la empleabilidad general de la FP, aunque no responda directamente en ocasiones a la realidad del mercado de trabajo. Aparece en el último periodo una nueva estrategia que pretende modernizar el sistema de FP de España con el fin de fomentar la participación, aumentar el nivel educativo, y abordar los déficits de capacidades técnicas.

Respecto a las enseñanzas universitarias, la mayoría de universitarios titulados difícilmente acceden a empleo acorde con su formación; además la cooperación entre las universidades y las empresas sigue siendo débil, aunque ha aumentado el número de iniciativas.

Según la evaluación del informe europeo, existe gran inestabilidad laboral del personal docente español, junto con bajo gasto en educación y reformas a largo plazo. Además, en general, el docente continúa teniendo dificultades en uso de las TIC (transición digital). Entre otras medidas al respecto, España aprobó medidas de apoyo a la formación de los profesores y de impulso a su movilidad. Continúa también insistiendo en el proceso de mejora de las condiciones de trabajo y contratación.

Se han detectado fuertes disparidades autonómicas en cuanto a los resultados de la educación y la formación y acceso a la educación.

Para comentar cual es la impresión general sobre la aplicación de estas medidas, o las tomadas para paliar las dificultades detectadas por esta evaluación semestral, comentaremos también 10 propuestas generales urgentes en la enseñanza según los profesores, recogidas por el periódico elpais: 
(https://elpais.com/sociedad/2019/09/26/actualidad/1569522809_943817.html)

Un pacto educativo estable, frente al continuo cambio legislativo acaecido desde la democracia.

• Mayor autonomía para los docentes, entre otros incluyendo potestad para diseñar los currículos, o mayor autonomía para los centros en cuanto a labores de gestión de su docencia.
• Prestigiar la evaluación con pruebas de nivel comparables que contrasten la eficacia de los métodos docentes.
• Disminución de las ratios, reduciendo el número de alumnos por clase junto con aumentar el número del profesorado. Grupos más pequeños permiten enseñanza más personalizada.
• Mayor formación del profesorado, aumentando la exigencia, con un sistema similar al MIR o mejorando la formación continua de docentes entre otros.
• Actualizar la práctica docente renovando su práctica y reduciendo la carga burocrática.
• Incluir recursos como trabajadores sociales en la enseñanza reglada para compensar y trabajar en profundidad las desigualdades sociales en la educación.
• Mejores mecanismos de diagnóstico para reducir el fracaso escolar. Herramientas de detección y ayuda ante las dificultades del alumnado.
• Mejora de instalaciones o redistribución de espacios.
• Aumento de la inversión en educación sobre todo en la red pública.

En general, parece haber consenso sobre la necesidad de mejoras en inversión infraestructura, recursos y autonomía. Además de la disminución de los ratios de alumnos por docente y actualización de metodologías, incluyendo mecanismos orientados a prevenir el fracaso escolar.

Si bien el sistema educativo español debería mejorar en algunos aspectos comentados anteriormente, la OCDE también señala algunas ventajas que presenta respecto a otros países, destacando: Un nivel educativo de las personas entre 25 y 64 años en aumento, aumento considerable de la tasa de graduados de Bachillerato del 56 % al 81 %, alta tase de escolarización en Educación Infantil llegando al 97 % de niños de 3 a 5 años (frente al 87 % promedio de la OCDE), menor brecha salarial entre mujeres y hombres con estudios superiores en comparación con la media de la OCDE: un 82 % con el mismo nivel educativo (frente a la media de la OCDE del 75 % y UE del 76 %).